Soy Francisco Rojas Moncada, un apasionado de la tecnología y un firme creyente de que la innovación puede transformar realidades. Llevo más de 20 años liderando proyectos de transformación digital en Estados Unidos, Latinoamérica y Europa. Desde el lanzamiento de Bees2Biz, mi empresa de desarrollo tecnológico, he trabajado con soluciones como blockchain, inteligencia artificial y desarrollos tecnologicos en diferentes industrias, ayudando a empresas a crecer y adaptarse a los desafíos del futuro. Pero nunca imaginé que mi proyecto más personal y transformador nacería de una conversación con mi mamá.
Mi mamá, Martha Moncada, tiene 88 años y es el ejemplo vivo de que el envejecimiento puede ser una etapa activa, digna y llena de propósito. Aún toma clases, participa en multiples eventos, es muy activa en la comunidad, lee a diario y siempre ha defendido que la vejez no es una condena, sino una oportunidad para seguir aprendiendo y contribuyendo.
Un día, durante una de nuestras charlas, me hizo una pregunta simple pero poderosa: «¿Qué pasa con todas las personas mayores que no tienen la misma suerte que yo?»
Esa pregunta me golpeó. En América Latina, hay más de 76 millones de personas mayores de 60 años, y para 2050 esta cifra se duplicará. Sin embargo, 1 de cada 6 adultos mayores sufre algún tipo de abuso o abandono, y el 60% vive con alguna condición de salud que podría prevenirse con intervenciones tempranas. Las brechas en acceso a tecnología, salud y educación están dejando atrás a una generación entera que merece más.
Fue entonces cuando nació TITI, durante el programa Stanford Rebuild en 2020. Imaginé una plataforma donde los adultos mayores no fueran invisibles, sino los protagonistas. Una “super app” que conecta a las personas mayores con servicios, programas de bienestar, eventos culturales y redes de apoyo comunitario. Una herramienta tecnológica que no solo resuelve problemas, sino que transforma sociedades.
Pero la visión creció.
No tardé en darme cuenta de que este no era solo un problema de tecnología, sino de cómo el mundo percibe el envejecimiento. TITI debía ser más que una app; tenía que ser un ecosistema que conectara a las familias, los gobiernos, las EPS, las universidades y empresas tecnológicas en un mismo lugar. No se trataba solo de asistencia, sino de generar valor: empleo para los mayores, educación continua, acceso a servicios de salud y prevención.
Aquí vino el primer gran pivote.
Comencé con una idea sencilla de conectar personas mayores con directorios de servicios, pero pronto entendí que debía repensar el modelo completo. Las personas mayores no solo necesitaban servicios, sino también empoderamiento y autonomía. TITI evolucionó hacia una plataforma que ofrece rutas de protección, oportunidades de aprendizaje y herramientas para participar activamente en la economía digital.
La vida, en su maravillosa ironía, me trajo una pieza clave dos años después. Mi mamá me presentó a Robinson Cuadros, su gran amigo y uno de los geriatras más influyentes de América Latina. Al hablar con él, fue como si nos hubiéramos conocido de toda la vida. Robinson no solo comparte mi visión, sino que ha dedicado su carrera a defender los derechos de las personas mayores y transformar los sistemas de salud. Desde ese momento, él se convirtió en mi socio y juntos llevamos a TITI a un nuevo nivel.
TITI ahora es mucho más que una plataforma.
Es una revolución digital diseñada para construir la primera red social y económica para personas mayores en América Latina. Utilizamos inteligencia artificial y machine learning para personalizar las experiencias de cada usuario, brindando recomendaciones de servicios y generando datos que permiten a los gobiernos y empresas tomar decisiones informadas.
Nuestra visión es clara:
Para 2030, queremos impactar a más de 5 millones de personas mayores en la región, reduciendo los índices de soledad y abandono y promoviendo el envejecimiento activo. Estamos construyendo un ecosistema donde cada actor—gobiernos, empresas y familias—pueda contribuir a que las personas mayores vivan más y vivan mejor.
Este no es solo un proyecto; es una misión de vida.
Lo que empezó como una charla con mi mamá se ha convertido en una fuerza imparable que está cambiando narrativas y derribando estereotipos. La tecnología es solo la herramienta; el verdadero motor es el amor y el respeto por quienes nos abrieron el camino.
¿Quieres ser parte de este cambio?
Si compartes nuestra visión o crees que desde tu empresa, institución o comunidad puedes sumar al impacto de TITI, contáctanos. Estamos construyendo alianzas con gobiernos, empresas tecnológicas y organizaciones que quieran formar parte de la transformación del envejecimiento en América Latina.
👉 Escríbeme directamente aquí: LinkedIn Francisco Rojas Moncada
👉 Conoce más sobre TITI: www.titi.social
El futuro de nuestras comunidades mayores empieza ahora.